🧘♂️ Si la mente es como una pantalla llena de estímulos, el cuerpo es el escenario donde todo ocurre.
No es un accesorio. Es tu hogar.
Tu espacio de juego real.
Y en esta práctica, lo vamos a recorrer con atención plena.
🎮 Piensa en esta meditación como si entraras a explorar tu avatar desde dentro, en tiempo real, como si activarás el modo “exploración interna” en un RPG de conciencia.
Cada sensación será una pista.
Cada movimiento, una onda.
Cada respiración… una guía.
🌬️ Paso 1: Encuentra tu espacio y conecta con la respiración
Busca un lugar tranquilo.
Ponte cómodo, sentado o tumbado.
Cierra los ojos.
🕹️ Imagina que estás iniciando sesión en tu cuerpo.
Ahora eres tú, contigo.
Empieza por sentir la respiración.
No la cambies. No la controles.
Solo obsérvala. El aire entra… el aire sale.
El pecho se expande… el cuerpo se mueve con él.
Déjate llevar por ese ritmo, como si el aliento fuera una marea suave recorriendo tu mundo interior.
🌊 Paso 2: Explora la superficie: hombros, brazos, manos
Siente cómo los hombros suben y bajan con cada respiración.
Esa ondulación mueve también los brazos, las manos, hasta las yemas de los dedos.
Como si cada exhalación fuera una ola que los mece suavemente.
🎮 Observa cada detalle como si estuvieras recorriendo un paisaje táctil.
No necesitas entender, solo sentir.
Como si cada célula te hablara en un idioma silencioso.
🌟 Paso 3: Baja por la columna: el eje de tu avatar
Ahora, lleva tu atención a la espalda.
Siente cómo la respiración recorre la espalda como una suave corriente de luz.
Sube y baja. Se expande y se repliega con cada aliento.
Percibe el movimiento en la zona lumbar, en la parte alta, en el cuello.
Eres consciente de cómo tu cuerpo se mantiene en equilibrio.
No hay prisa. Solo presencia.
❤️ Paso 4: Entra al núcleo: el pecho, el corazón, la vida
Siente los latidos.
Imagina cómo la sangre fluye desde el centro hacia cada rincón.
Cada pulsación es como una señal que dice: “Estoy vivo. Estoy aquí.”
🧘♀️ Quédate unos momentos ahí, respirando.
Notando cómo la respiración masajea el tórax, el corazón, el centro de tu cuerpo.
🔥 Paso 5: Desciende al vientre y explora el calor interno
El diafragma baja y sube.
Empuja suavemente a los órganos del abdomen.
Siente el calor. La presión. Las sensaciones.
Como si te sumergieras en una cueva tranquila, profunda y silenciosa.
No estás analizando. Solo sintiendo.
🦵 Paso 6: Piernas, pies, anclaje
Lleva tu atención a las piernas.
Muslos, rodillas, pantorrillas, tobillos, pies.
Siente el contacto con el suelo, la silla, la esterilla o donde sea que hayas decidido ponerte.
Nota el peso. La temperatura. El soporte.
🎮 Es tu anclaje. Tu base.
Estás en tierra firme, aunque estés dentro.
🌐 Paso final: siente el cuerpo como un todo
Ahora intenta sentir todo tu cuerpo a la vez.
Como una unidad. Como una estructura viva que respira, vibra, siente.
Imagina que la respiración lo atraviesa de arriba abajo, como una corriente suave que te une desde la coronilla hasta la planta de los pies.
Estás presente.
No hay más que hacer.
Solo sentir. Solo estar.
Quédate unos minutos más en este estado.
Disfruta de esta sensación de ser tú… sin distracciones, sin juicio, sin meta.
Estás en el juego. Pero también eres el jugador que lo habita con consciencia.
🏁 Fin del capítulo
🚀 Continúa con: Capítulo 3: Desarma al ego: actitud consciente para enfrentar al jefe final interno
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